El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, ha destacado hoy el éxito de la indicación geográfica ”Vinos de la Tierra de Castilla”, algo que, en su opinión, ratifican “los 100 millones de botellas que, en menos de un año, se han embotellado bajo esta denominación”. Durante su discurso el presidente se refirió a las numerosas dificultades y a la oposición que hubo que superar para poner en marcha esta iniciativa y ganar este pleito. “Nos ha costado mucho esfuerzo, sacrificio y algún disgusto sacar adelante la indicación geográfica de los “Vinos de la Tierra de Castilla”, ya que encontramos la enemistad del Gobierno central y la adversidad, incluso jurídica, de Castilla y León, pero frente a los argumentos en contra, siempre estuvimos dispuestos a compartir esta indicación”, recordó José Bono. . El presidente regional alabó además el respaldo y apoyo mostrado por el sector (bodegas, organizaciones agrarias y empresarios) para hacer realidad este proyectoy explicó que “hemos querido que una tierra que ha basado su desarrollo histórico en el vino no lo tuviese como problema, sino como esperanza y solución”. En ese sentido, José Bono ha comentado que no cree que haya ninguna persona relacionada con el mundo del vino que “si quiere ver y diseñar el futuro en el sector, no piense en Castilla-La Mancha por su extensión, capacidad competitiva y cierta tenacidad”. Así lo manifestó el presidente durante la clausura de la “I Conferencia de los Vinos de Mesa con Indicación Geográfica”, que se celebró hoy en el Salón de Tapices del Hotel Meliá Castilla de Madrid y a la que también asistió el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Alejandro Alonso. Los “Vinos de la Tierra de Castilla” han sido los protagonistas de esta Conferencia, que ha organizado la Asociación de Vinos de Mesa de España (AVIMES). Castilla-La Mancha, región pionera en impulsar los Vinos de la Tierra En su apuesta por la calidad y por buscar nuevas fórmulas que favorezcan la implantación y consolidación de nuestros vinos en los mercados nacional e internacional, el Gobierno de Castilla-La Mancha fue pionero al impulsar decididamente, mediante una Ley, la mención Vinos de la Tierra de Castilla para los vinos producidos a partir de uvas de nuestra Comunidad Autónoma. El objetivo de esta Ley, que fue aprobada el 12 de julio de 1999, es facilitar la identificación en el mercado de unos vinos que responden a las demandas de una parcela de consumo distinta a la que opta por las denominaciones de origen. Asimismo, con esta nueva regulación se aprovechan las posibilidades de la legislación comunitaria que permite utilizar una indicación geográfica para designar un vino obtenido de variedades recolectadas exclusivamente en nuestro territorio. De esta forma, en la etiqueta se hacen constar las indicaciones de las variedades de uva, añadas, territorio de origen, método de elaboración u otros aspectos que son cada vez más valorados por el consumidor, que busca un producto diferenciado. La iniciativa del Ejecutivo regional contó con el apoyo mayoritario del sector: Federación Española del Vino, la Asociación de Empresarios de Vinos de Mesa de España (AVIMES), UCAMAN, COAG, ASAJA, UPA, Asociación de Enólogos de Castilla-La Mancha, Denominaciones de Origen de Almansa y Valdepeñas, Cámara de Comercio de Albacete, Carlos Falcó, Félix Solís y Bodegas Mariscal, entre otros. Sin embargo, esta indicación no estuvo exenta de polémica, ya que la Junta de Castilla y León interpuso un recurso ante el Tribunal Constitucional en contra de la Ley de creación de los “Vinos de la Tierra de Castilla”. Finalmente, este recurso fue rechazado por el Constitucional en enero del 2000 y el nuevo equipo del Ministerio de Agricultura cambió su actitud y reconoció, mediante una Orden firmada por el ministro Jesús Posada, la mención “Vinos de la Tierra de Castilla”. La decisión del Tribunal Constitucional fue un espaldarazo a los intereses de Castilla-La Mancha en el sector vitivinícola, ya que los Vinos de la Tierra de Castilla están ya reportando a la región riqueza, rentabilidad y beneficios. Una iniciativa que está dando muy buenos resultados En las últimas campañas, se han declarado 70 millones de litros embotellados bajo la mención “Vinos de la Tierra de Castilla”, lo que supone cerca de 100 millones de botellas. Para poder establecer una comparación, basta con señalar que la D.O Ribera del Duero declaró alrededor de 17 millones de litros. Asimismo, hay que señalar que más de 100 empresas han declarado embotellar Vinos de la Tierra de Castilla y que, entre ellas, se encuentran empresas como Freixenet, Bodegas Olarra, el Grupo Arco, Bodegas Luis Gurpegui Muga (de Navarra), Bodegas Arane (de Vizcaya) y numerosas cooperativas y empresas de Castilla-La Mancha. Pero estos resultados son sólo el principio, ya que el sector vitivinícola castellano manchego y español han creído firmemente en esta iniciativa. Son muchas las empresas que anuncian inversiones en nuestra región para aprovechar el gran potencial para la producción de vinos con que cuenta Castilla-La Mancha. Asimismo, otras Comunidades Autónomas, como Cataluña y Castilla y León, han apostado también por la creación de estas indicaciones geográficas en sus territorios. Por último, señalar que la apuesta de Castilla-La Mancha para potenciar la calidad de sus vinos y buscar nuevas fórmulas de comercialización no ha terminado aquí. El pasado mes de agosto, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha creado, mediante Decreto, una nueva denominación “Vinos de Calidad Reconocida producidos en pagos determinados” Son unas denominaciones de origen muy especiales, con las que se trata de amparar ciertos vinos muy singulares, nacidos de una estrecha relación entre viña y bodega (similar al “chateau” francés) y que cuenta con una calidad excepcional reconocida tanto por especialistas como por consumidores.
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