Castilla-La Mancha: Balance del año agrícola

El consejero de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, Alejandro Alonso, ha hecho balance del año agrícola, afirmando que el sector agrario ha superado las dificultades de un año complicado, por los problemas de seguridad alimentaria y los derivados de las crisis de precios de sectores básicos, como han sido el vino y el aceite.

La lucha contra la enfermedad de la Encefalopatía Espongiforme Bovina, las crisis del aceite de orujo, fiebre aftosa y peste porcina clásica, y la especial situación que pasa el sector vitivinícola regional con los nuevos programas de reestructuración y con una importante disminución en los precios han configurado un intenso año. Según Alejandro Alonso, “las respuestas ante los nuevos retos, que se han afrontado, han sido eficaces, coordinadas, transparentes y rigurosas”.

Para el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, “las producciones agrícolas han venido presididas por una bajada de las cosechas de cereales compensadas en parte por una mejora sensible de los precios”. Bajó también la producción de vino con respecto al año anterior, teniendo en cuenta que la producción del año 2000 fue una cosecha récord. El sector del aceite de oliva tuvo una producción superior al año anterior, con precios moderados y con tendencia alcista.

Asimismo, Alonso señaló que “las producciones ganaderas han tenido importantes resultados en todas las especies, destacando el sector del ovino y del caprino, así como en el sector de la leche de vaca. Frente a estos buenos comportamientos nos encontramos con la fuerte caída de precios, afortunadamente ya recuperados, y de la producción de la carne de vacuno por la enfermedad de la Encefalopatía Espongiforme Bovina”. A pesar de la peste porcina clásica declarada este año en España, el sector porcino ha tenido un importante incremento en la oferta y precios moderadamente altos.

Más seguridad alimentaria

Alonso afirmó que “el año que termina ha estado salpicado de diversas incidencias en el sector agroalimentario español: la enfermedad de la Encefalopatía Espongiforme Bovina, la fiebre aftosa, la peste porcina clásica y el problema desatado por la inmovilización del aceite de orujo. Todas estas crisis han reforzado la convicción de los consumidores y también de los productores de que el control sanitario sobre los alimentos es irrenunciable”.

El consejero de Agricultura y Medio Ambiente resaltó que “en Castilla-La Mancha se ha trabajado duro para luchar contra la EEB, siempre de manera coordinada y leal con el Ministerio de Agricultura”. La eficacia del Plan coordinado de lucha contra esta enfermedad radica en la labor de los técnicos, funcionarios, ganaderos y Guardia Civil. La incidencia en nuestra región después de realizar casi 20.000 test priónic es de las más bajas de España.

A comienzos del verano se declararon dos focos de peste porcina clásica en Talayuelas (Cuenca). La intensidad y el rigor que emplearon los ganaderos, veterinarios y fuerzas de Seguridad del Estado hizo atajar de manera drástica esta enfermedad en nuestra región, mientras todavía persiste en otras zonas de España.

Alejandro Alonso afirmó que “hoy más que nunca el control y la calidad de los alimentos es una garantía para los consumidores. Todas estas crisis han servido para paliar algunas deficiencias que existían, especialmente en la eliminación de los materiales específicos de riesgo y en la alimentación animal. Si bien la gestión de la crisis de la EEB se ha llevado con eficacia, quedan muchas cosas por hacer”.

Nuevas bases para el sector del vino

El Gobierno de Castilla-La Mancha en complicidad con el sector vitivinícola regional ha alcanzado un importante logro al conseguir que en el año 2001 se hayan promovido planes de reconversión y reestructuración de viñedo por valor de 13.000 millones de pesetas, es decir, más que todas las comunidades autónomas juntas. Alonso indicó que “estamos en el buen camino de alcanzar, en el plazo de ocho años, 100.000 hectáreas de viñedo adaptadas a las demandas del mercado”.

Asimismo, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente consideró que la presente campaña vitivinícola en España no ha estado exenta de dificultades por el precio de la uva y el vino. No obstante, en Castilla-La Mancha el sector demostró su capacidad para afrontar esta situación, cooperando y acordando precios que sirvieron, al menos, para desbloquear un conflicto que hacía peligrar la vendimia.

Con un alto grado de consenso se han resuelto las elecciones a los consejos reguladores de las Denominaciones de Origen de los vinos. Las denominaciones de Origen de vinos de nuestra región tienen un papel muy importante en la acreditación de la calidad de los vinos y en su promoción nacional e internacional. El año se cierra con el nacimiento de una nueva Denominación de Origen de vinos, la octava, Ribera del Júcar.

Con el respaldo mayoritario del Consejo Asesor Agrario se crea el banco regional de derechos de plantación de viñedo en el que se integrarán los cupos asignados por la U.E., los derechos generados en los procesos de regularización y otros que pudiera adquirir la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente.

En materia de comercialización, Castilla-La Mancha sigue siendo un lugar elegido por los grandes grupos comercializadores de vino de España. Las principales empresas comercializadoras de vinos de Rioja, Ribera del Duero, Jerez, etc. están realizando importantes inversiones en nuestra comunidad autónoma.

La industria agroalimentaria sinónimo de calidad

Para Alejandro Alonso, el año 2001 ha sido próspero en inversiones de la industria agroalimentaria de Castilla-La Mancha para fomentar la calidad de los alimentos que se producen y se comercializan desde nuestra región. “El Programa de Fomento de la Calidad Agroalimentaria (FOCAL), aprobado por el Gobierno regional, está siendo un magnífico instrumento de apoyo a las empresas agroalimentarias y a las cooperativas agrarias para conseguir la modernización de los procesos de fabricación y la utilización de los últimos avances tecnológicos”, indicó el consejero.

El esfuerzo inversor de la industria agroalimentaria regional durante el año 2001 ha sido de 50.000 millones de pesetas, contando con un volumen de subvenciones de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente por un valor de 12.325 millones de pesetas. El principal sector inversor es el vino, con el 50% de la inversión realizada por todo el sector agroalimentario. Hay que destacar la capacidad inversora que está adquiriendo el sector hortofrutícola (ajo, champiñón, melón, etc.), que en este año se ha convertido en el segundo sector en inversiones.

Alejandro Alonso significó que “una de las principales novedades del año 2001 ha sido la nueva línea de ayudas aprobada por el Gobierno regional para el sector de las panaderías tradicionales” con el fin de apoyar la modernización de su maquinaria y equipos. En este primer año de vigencia del programa se han concedido 80,2 millones de pesetas a 66 panaderías, que van a realizar inversiones por valor de 41 millones de pesetas.

La U.E. aprueba el programa de desarrollo rural

El nuevo Programa Operativo de Castilla-La Mancha (2000-2006) va a permitir la aplicación en nuestra región de un nuevo Programa de Desarrollo Rural, que ha sido aprobado por la Comisión Europea en el ecuador del año que termina. “Las iniciativas comunitarias LEADER+ y PRODER II son las herramientas que dispondrán los grupos de Acción Local para hacer efectivos todos los proyectos que supongan una diversificación e innovación de la actividad local, valorización de los recursos medioambientales o un incremento de la competitividad de los servicios rurales”, señaló Alejandro Alonso.

El nuevo Programa de Desarrollo Rural abarca a todo el territorio regional, excepto las capitales de provincia y los corredores de desarrollo industrial. La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente aprobará en breve los 28 Grupos de Acción Local que desarrollarán las iniciativas LEADER+ y PRODER II. El consejero de Agricultura subrayó que “para este Programa de Desarrollo Rural está previsto un gasto público de 27.000 millones de pesetas, al que hay que añadir la aportación privada. En total se superarán los 45.000 millones de pesetas”.

Nuevos regadíos y mejora de los caminos

Como en los últimos años, afirmó Alejandro Alonso, “el Gobierno de Castilla-La Mancha y los agricultores castellano-manchegos hemos seguido, en el año 2001, realizando un gran esfuerzo inversor en la mejora, consolidación y transformación de nuevos regadíos”. Durante el presente año se han invertido 10.175,6 millones de pesetas para optimizar la gestión del agua de utilidad agraria, para crear infraestructuras comunes para las comunidades de regantes, para modernizar los riegos en parcela, etc.

La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha apoyado todas estas iniciativas de los regantes aprobando subvenciones por valor de 3.619 millones de pesetas. Entre todos los proyectos subvencionados podríamos destacar los siguientes: Comunidades de Regantes de Hellín (Albacete), de Montealegre del Castillo (Albacete), Tomelloso (Ciudad Real), Albalate de Las Nogueras (Cuenca), Arbancón (Guadalajara), Alcolea de Tajo (Toledo), La Rinconada (Toledo), etc.

El consejero de Agricultura y Medio Ambiente explicó que “durante el año 2001 se ha puesto en marcha un nuevo programa de cooperación con las mancomunidades de Ayuntamientos para la conservación de la amplia red de caminos que existe en Castilla-La Mancha”.

Con el fin de dotar de una infraestructura estable a las Mancomunidades de municipios, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha concedido ayudas por valor de 675,6 millones de pesetas para la adquisición de maquinaria destinada a la mejora y conservación de los caminos rurales. La inversión total realizada por las Mancomunidades de Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo, y la Diputación de Cuenca ha sido de 1.078,8 millones de pesetas.

449 jóvenes se incorporan a la agricultura

Para el consejero de Agricultura y Medio Ambiente “la modernización del sector agrario exige que las nuevas generaciones se incorporen a la actividad agraria y la consideren como una actividad profesional digna y de futuro”. Para estimular el rejuvenecimiento del sector agrícola y ganadero de Castilla-La Mancha y promover la incorporación de los jóvenes a la agricultura, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente concede una serie de ayudas para la primera instalación de estos jóvenes.

En el año 2001 se han incorporado 449 jóvenes y se han aprobado 1.013 expedientes de modernización de explotaciones agrarias. La inversión financiable ha sido de 7.487 millones de pesetas y una subvención total de 3.473 millones de pesetas.

Dentro del Programa de Formación Agraria que desarrolla la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente se incluyen 55 cursos, denominados de primera instalación, que están dirigidos, de manera especial a los jóvenes que se incorporan a esta actividad económica. Los cursos son impartidos en los Centros de Formación Agroambiental de Albacete y Cuenca y en el Instituto de la Vid y el Vino de Castilla-La Mancha (IVICAM).

JCCM

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