Esta valoración responde a diferentes condicionantes climatológicos que han sido determinantes en esta calificación: la ausencia de lluvias durante la primavera provocó déficit hídrico durante un verano en el que los días no fueron excesivamente calurosos y las noches fueron frescas lo que derivó en la buena maduración de la uva; hubo ausencia de lluvia en el periodo de recolección con lo que se evitó la podredumbre.
El proceso para calificar los vinos de cada cosecha es arduo y exhaustivo. Tras la recolección de la uva y la elaboración del vino en la bodega, cada empresa hace la declaración oficial de cosecha. Posteriormente, los técnicos del consejo regulador inician un proceso de recogida muestras (homogeneizadas por variedades y tipos). Los vinos –que para esta cosecha han sido unos 240– son analizados por catadores profesionales externos al Consejo Regulador en 18 sesiones. Con todos los resultados se hace una valoración global de todos ellos (blancos, rosados, tintos jóvenes y tintos jóvenes de bobal). Esta propuesta se eleva a los consejeros de la Denominación de Origen Utiel-Requena, que lo debaten y aprueban en sesión plenaria.
La Denominación de Origen Utiel-Requena –al oeste de la provincia de Valencia–, comprende más de 39.000 hectáreas de viñedo, tiene una extensión de 1.800 kilómetros cuadrados en los que se reparten más de un centenar de bodegas y están censados más de 7.000 viticultores
CRDO UTIEL-REQUENA