El vino, del que se han producido 1.200 litros en una primera fase, se encuentra en periodo de degustación antes de su lanzamiento al mercado y presenta «valores y estándares de calidad», según afirmó el delegado de Innovación.
La directora de IFAPA de Cabra, Brígida Jiménez, destacó que este vino ecológico de frutas, que contiene un bajo contenido en alcohol (5,5-6 grados), está listo para ser degustado en catas con el fin de someterlo a posibles modificaciones y adecuarlo a la demanda de los consumidores para su posterior venta, prevista para dentro de dos años, cuando acabe la orden de incentivos.
Por su parte, la directora técnica de la cooperativa Almazaras de la Subbética, Nuria Yáñez, señaló que este producto es una sidra natural con un poco de gas carbónico inyectado. Además, ha destacado que es un vino «muy ligero» que contiene aromas muy fuertes a membrillo fresco.
Este nuevo producto es el primer resultado de un proyecto de investigación, iniciado el año pasado y coordinado por la investigadora Isabel López, que presenta tres líneas de trabajo: elaboración de bebidas fermentadas de baja graduación alcohólica a partir del membrillo, la creación de un zumo de frutas del membrillo y la producción de vinagre de membrillo con y sin envejecimiento en madera.
IFAPA