La consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Gema Amor, ha instado al ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a que reasigne fondos adicionales para continuar con los planes de reestructuración del viñedo en la Comunidad Valenciana teniendo en cuenta la eficacia en la gestión y ejecución de las ayudas que la conselleria ha hecho.
Amor ha comparecido en las Cortes Valencianas para explicar la gestión que su Departamento está llevando a cabo de las ayudas procedentes de la Unión Europea, a través del ministerio, para la reestructuración del viñedo en la Comunidad Valenciana.
Durante su intervención, la consellera ha destacado el respaldo que desde su Departamento se está dando a las medidas de a reestructuración y reconversión de los viñedos “como la principal herramienta para promover el incremento de la rentabilidad y competitividad del sector vitícola y el impulso de la modernización e innovación de las explotaciones mediante la reconversión varietal, la reimplantación de viñedos y las mejoras técnicas de gestión, logrando así un incremento de su eficacia productiva y la mejora de la calidad”.
Según ha explicado, este impulso ha llevado a que hasta el momento se hayan aceptado en la Comunidad Valenciana planes que permitirán actuar en una superficie de cerca de 17.000 hectáreas, destacando la celeridad y eficacia con la que se desarrollan estos planes de modernización a diferencia de otras comunidades autónomas.
La consellera ha explicado que los fondos para la financiación de estos planes son asignados por la Unión Europea a los gobiernos de cada estado miembro que, en nuestro caso a través del ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, es el encargado de repartir los fondos entre las diversas Comunidades Autónomas, pudiendo realizar un reasignación adicional a la cantidad inicial en función de la rápida ejecución de los planes y las previsiones para la campaña.
“Por este motivo- ha dicho- es muy importante que los criterios de asignación, tal y como se ha venido haciendo hasta ahora, sean objetivos, y eviten cualquier interferencia política y partidista que pueda romper el equilibrio territorial de la reestructuración favoreciendo a unas u otras autonomías no por criterios de eficacia sino por motivaciones políticas”.
En este sentido, Amor ha informado que la Comunidad Valenciana ha recibido desde el ejercicio 2000/01 hasta 2002/03 un total de 33,9 millones de euros de los que 20,3 millones de euros fueron concedido en una primera asignación y 13,6 millones han correspondido a reasignaciones, concedidas gracias a la eficaz gestión llevada a cabo por la conselleria de Agricultura para la reeestructuración del viñedo que ha llevado a que, en cada ejercicio se ha certificado más del 95% de la cuantía de la ayuda asignada en fechas anteriores al final de la campaña”.
Por lo que respecta al presente ejercicio, la consellera ha explicado que la Comunidad Valenciana podría superar también ampliamente la previsión inicial de las ayudas, por lo que estamos en condiciones de poder certificar una cantidad superior a la cuantía establecida para esta anualidad.
Por ello, Amor confía en un comportamiento leal del actual gobierno del estado que permita continuar con los planes y acciones iniciadas, de forma que los fondos de la Unión Europea, imprescindibles para continuar con la modernización de nuestro sector vitícola, sean distribuidos en proporción a los planes aceptados, a las medidas ejecutadas por los viticultores valencianos y la eficacia de su gestión, ajustándose así a la realidad de la Comunidad Valenciana.
Fomento de la calidad y modernización de las estructuras
En cuanto a la importancia que los planes de reconversión y reestructuración tienen para garantizar el futuro del sector vitícola de la Comunidad Valenciana, la consellera de Agricultura ha explicado que la gestión realizada por su Departamento tiene como objetivo lograr la utilización de variedades de calidad, incluidas en el registro de variedades para la Comunidad Valenciana, y una gestión óptima del cultivo que garantice la calidad de la producción.
“Asimismo, -ha explicado- los criterios de priorización para la concesión de ayudas, (en primer lugar a los jóvenes agricultores, seguidos de los agricultores a título principal, los viticultores de nueva plantación que consigan una concentración con otras parcelas de viñedo y luego el resto), han sido consensuadas con las organizaciones con las organizaciones profesionales agrarias y cooperativas y reflejan la voluntad de la conselleria de Agricultura de favorecer la incorporación de jóvenes, mantenimiento de la población y redimensionamiento de las explotaciones”.
En este punto, Amor ha recordado que hasta la fecha la conselleria de Agricultura ha satisfecho más de 41 millones de euros en concepto de ayudas de las actuaciones de reestructuración y reconversión realizadas y certificadas para lo que se ha contado, además de las ayudas procedentes de la Unión Europea, con fondos propios de la Generalitat Valenciana.
Ley de Ordenación del Sector Vitivinícola de la Comunidad Valenciana
Además de la gestión de las ayudas para la reestructuración, por otra parte, en su intervención Amor ha explicado las medidas que la conselleria de Agricultura está llevando a cabo para garantizar la competitividad de los vinos de la Comunidad Valenciana, el mantenimiento de la superficie destinada al cultivo de uva de vinificación y de mesa y la mejora de la calidad de la producción del vino.
En este sentido ha destacado la futura Ley de Ordenación del Sector Vitivinícola de la Comunidad Valenciana, actualmente en tramitación, con la que se pretende garantizar la consolidación de las cotas de calidad y producción alcanzadas hasta el momento y el crecimiento hacia nuevas metas, defendiendo nuestro potencial vitícola mediante el mantenimiento de la superficie dedicada al viñedo, en un marco de desarrollo sostenible, equilibrio territorial y cohesión social.
En ella se incluye, además de las medidas de reestructuración y reconversión, otros aspectos como la regulación del derecho de retracto respecto de las trasferencias de derechos de plantación que pudieran ir a otras Comunidades Autónomas, la creación de una reserva autonómica de derechos de plantación, el fomento de la recuperación de especies autóctonas o la regulación de técnicas de cultivo.
Entre estos aspectos, la consellera ha destacado la creación de la reserva autonómica de derechos de plantación, como instrumento que va a permitir mantener el potencial de la producción, actuando como un banco en el que pasan a formar parte los derechos de plantación de nueva creación concedidos por la Unión Europea, los no utilizados en los plazos establecidos o los que por cualquier otra circunstancia hayan caducado, así como los que por cesión, venta, penalización u otra circunstancia puedan incorporarse al patrimonio de la Generalitat.
Los derechos incluidos en el banco se adjudicarán a los viticultores que lo soliciten, de forma que se garantice que los mismos no se pierdan y que se mantiene el potencial productivo de la Comunidad Valenciana
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