La inversión total de maquinaria nueva adquirida por los agricultores en España a lo largo de 1999 se estima en 175.000 millones de pesetas, con un total de 44.433 unidades inscritas en los Registros Oficiales, según el Informe de Inscripción de Maquinaria Agrícola elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Estos datos ponen de relieve la tendencia de crecimiento del parque de maquinaria desde 1997 en un 4%. El reparto de inscripciones por capítulos está encabezado por los tractores, las unidades automotrices y las máquinas arrastradas y suspendidas. El mayor crecimiento de las compras de maquinaria se ha dado en el equipamiento de tractores, así como en la adquisición de unidades automotrices. La compra de tractores en 1999 alcanzó la cifra de 22.541 unidades, con un volumen de inversión próximo a los 95.000 millones de pesetas. En este capítulo es destacable el predominio de la doble tracción y el descenso la potencia media de los tractores inscritos, que ha pasado de 85 C.V. en 1998 a 83 en 1999. Asimismo, cabe destacar la fuerte demanda de tractores estrechos (viñeros y fruteros), que representan el 37%del mercado nacional. Por lo que se refiere a las máquinas automotrices, la inversión total asciende a 14.500 millones de pesetas. En este capítulo las compras de los agricultores registran una cifra ligeramente superior a 1998, con un total de 1.210 unidades compradas, debido al fuerte incremento de los equipos de carga y transporte, un 53% y 21% respectivamente, compensando el descenso experimentado por los equipos de recolección. El informe elaborado por el MAPA refleja la tendencia al alza en las cosechadoras de uva (vendimiadoras), de forraje, de remolacha, de hortalizas, así como de las plataformas de recolección de frutales y los vibradores de troncos autopropulsados para la recolección de aceituna. La evolución en la compra de estas máquinas automotrices es un reflejo del impulso que están obteniendo determinados equipos de recolección de cultivos tan importantes para España como el olivar, viñedo, algodón y los frutales. En lo que respecta a la compra de maquinaria arrastrada o suspendida, se ha observado un crecimiento del 11% respecto a 1998. En este capítulo destacan las inscripciones correspondientes a cisternas distribuidoras de purines, equipos para tratamientos fitosanitarios y empacadoras.
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