El consejero de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, Alejandro Alonso, manifestó ayer, durante su intervención en el Pleno de las Cortes, su “gran satisfacción” por el éxito que en Castilla-La Mancha han tenido los Planes de Reestructuración y Reconversión varietal del viñedo y destacó que “este éxito ha sido posible porque en esta Comunidad Autónoma, el Gobierno regional y el sector vitivinícola hemos hecho los deberes para conseguir la reconversión de 100.000 hectáreas en ocho años”.
“En el primer año de vigencia del Plan hemos logrado solicitudes para reconvertir más de 43.000 hectáreas, prácticamente la mitad de lo que el Ejecutivo regional tenía previsto para un plazo de ocho años”, señaló Alonso.
Alejandro Alonso recordó que el Gobierno castellano-manchego siempre ha valorado las medidas de reconversión del viñedo como una gran oportunidad para el principal sector económico regional. “Este tipo de medidas constituyen una de las piezas claves nuestra política de desarrollo del sector, junto a la defensa de nuestro patrimonio vitivinícola, la implantación de nuevas fórmulas de comercialización y la mejora tecnológica de las bodegas”.
A juicio del consejero, esta política de apoyo al sector vitivinícola, junto al esfuerzo realizado por viticultores, bodegueros y cooperativistas, han logrado que “hoy las principales comercializadoras de España miren hacia Castilla-La Mancha con perspectivas de futuro en el sector del vino”.
El responsable regional de Agricultura y Medio Ambiente recordó que la reestructuración del viñedo en nuestra Comunidad Autónoma no es una novedad. De hecho, se han llevado a cabo en 1986 y en 1997 otras dos actuaciones de reestructuración que han repercutido en 32.551 hectáreas.
Si bien estas dos actuaciones han supuesto una importante mejora de las explotaciones vitícolas y el cambio de variedades para adaptarse a los exigentes mercados y gustos de los consumidores, el Plan de Reestructuración y Reconversión del Viñedo contemplado en la actual OCM del Vino supone una oportunidad histórica para Castilla-La Mancha por el número de hectáreas que se pueden acoger al mismo.
Pioneros en regular las ayudas
Alonso señaló que el desarrollo reglamentario de la OCM del vino se inicio con cierta lentitud por parte de la Unión Europea y pasó un año antes de que se fijasen las disposiciones para la reestructuración del viñedo. “Sin embargo, Castilla-La Mancha fue la primera Comunidad Autónoma en regular las ayudas de reestructuración del viñedo –el 8 de agosto del 2000, cuatro días después de promulgarse el Real Decreto- y también fuimos los primeros en establecer un procedimiento informático de captura y tramitación de solicitudes”.
“El Gobierno regional, junto al sector vitivinícola de Castilla-La Mancha, hemos hecho los deberes para llevar adelante nuestro objetivo inicial: alcanzar la reconversión varietal de cerca de 100.000 hectáreas de viñedo y conseguir una mejora en las estructuras de las explotaciones vitícolas de la región”.
En este sentido, Alonso recordó que tras la aprobación de la Orden, se realizó una campaña de divulgación a través de los medios de comunicación, remitió una carta a los 150.000 viticultores inscritos en el Registro Vitícolas, envió cartas a todos los alcaldes de municipios con viñedo, se organizaron junto con las organizaciones profesionales agrarias y UCAMAN charlas-coloquio, conferencias, reuniones y cursos.
“Todo este esfuerzo ha tenido sus frutos y hemos logrado llegar con éxito a todos los plazos y esto no lo pueden decir todas las Comunidades Autónomas, ya que a algunas se les pasó el primer plazo de solicitud”, destacó el consejero.
43.785 hectáreas a reconvertir en el primer año de vigencia de los planes
En el primer año de vigencia de estos planes de reestructuración, se han presentado un total de 193 planes, que afectan a más de 11.000 viticultores, para la reconversión de 43.785 hectáreas de viñedo, es decir, el 43,7% de las 100.000 hectáreas fijadas como objetivo en ocho años. “Esta cifra de hectáreas es más que todas las denominaciones de origen de Castilla y León”.
Para la reconversión de estas hectáreas de viñedo, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha logrado un total de 9.533 millones de pesetas, lo que supone el 47% del total de dinero asignado a España (20.317 millones) por la Unión Europea.
“Hemos logrado casi tanta financiación para la región como el conjunto de las Comunidades Autónomas”, puntualizó el consejero.
Tras la presentación de solicitudes se ha iniciado su tramitación administrativa. “Hemos revisado los 193 planes presentados y se han aceptado 190 planes, que ahora se encuentran en un segundo trámite de revisión y audiencia en los casos que existe alguna incidencia”.
Solicitudes aceptadas
Tras la primera revisión de las solicitudes, se han aceptado 190 planes, que engloban a 10.286 viticultores, y que suponen la reconversión de 42.890 hectáreas de viñedo de toda la región, con una subvención de 48.818 millones de pesetas.
De los 190 planes aceptados, 48 son para la reconversión de 9.552 hectáreas en la provincia de Albacete; 59 son para reestructurar 16.471 hectáreas en la provincia de Ciudad Real; 51 planes afectarán a 8.619 hectáreas en Cuenca, 1 plan supondrá reconvertir 42 hectáreas en Guadalajara; y finalmente, 31 planes afectarán 8.205 hectáreas de viñedo en la provincia de Toledo.
La variedad de uva “cencibel o tempranillo” ha sido la más elegida por los agricultores en los planes de reconversión varietal del viñedo, con el 79,78% de la superficie solicitada. Le sigue la variedad “syrah”, “cabernet-sauvignon”, “garnacha tinta” y “merlot”.
El procedimiento administrativo para comprobar todos los planes finalizará el 30 de abril. “Esperamos que en esta fecha todos los expedientes estén listos para proceder con los pagos correspondientes”, dijo Alonso.
Por último, Alonso señaló que “creo que estamos ante una gran actuación para el viñedo de la región y, sin duda, va a suponer una revolución en la estructura productiva del sector y en la comercialización de los vinos que elaboran nuestros cooperativistas y bodegueros”.
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