La consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez, considera que es muy importante para Valdepeñas y su comarca que se apueste por la elaboración de un Plan estratégico cuyo principal objetivo sea seguir vendiendo vino, además de hacer rentable el producto al viticultor para que siga produciendo, todo ello con el fin de que el sector vitivinícola siga siendo un referente en Castilla-La Mancha y no desaparezca.
“No nos tenemos que olvidar que no sólo es importante producir vino sino también mosto y buenos destilados para hacer brandys. Todo eso en su conjunto hace que nuestro sector sea referente nacional e internacional y nuestro principal apoyo vendrá de ahí”, afirmó Gómez.
La consejera de Agricultura aseguró ayer lunes 24 de noviembre que el Gobierno regional está trabajando en la creación de una Fundación para la promoción de los vinos de Castilla-La Mancha, que acogerá a todos los agentes sociales relacionados con la producción de la uva. En esta Fundación estarán representadas todas las denominaciones de origen de vino, entre ellas la de Valdepeñas, que recibirá “ayuda directa para poder acometer las líneas de comercialización necesarias para poder seguir vendiendo vino”.
La consejera de Agricultura hacía estas declaraciones momentos antes de visitar las nuevas instalaciones del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valdepeñas que, según dijo, “no sólo cambia de imagen sino que también se prepara para adaptarse a la nueva ley del vino”.
Así, Gómez apuntó que, según esta ley, el Consejo Regulador pasará a ser una agrupación de productores que trabajarán para dar un mayor impulso a la Denominación de Origen, en este caso de Valdepeñas, a través de la innovación y de la mejora de la producción.
Por otro lado, y a preguntas de los periodistas, Mercedes Gómez tachó de “desafortunada” la situación que se está viviendo en Valdepeñas que ha llevado a las organizaciones agrarias con representación en la ciudad, ASAJA, COAG, UPA y la Asociación de Vendedores de uva de la Denominación de Origen Valdepeñas, a presentar una denuncia contra las grandes empresas vinateras por el aplazamiento de los pagos a los productores.
“Lo más importante es que todas las partes implicadas en la venta de la uva se sienten en una misma mesa, como lo hicieron, se cumplan los acuerdos y no se tenga que llegar a situaciones de denuncias”, aseveró la consejera. Sin embargo, en el caso de que el diálogo no prosperara, Gómez entiende que se hagan las reclamaciones convenientes, si bien subrayó “eso no es lo deseable para esta Consejería de Agricultura”.
Por otro lado, la consejera explicó que ya ha recibido por parte de las asociaciones agrarias una serie de propuestas para la renovación de la OCM del aceite de oliva, todas ellas con una base común: que se consiga una cantidad nacional de referencia superior a la existente y que se dé una ayuda directa al olivar de bajo rendimiento que ocupa las dos terceras partes de la superficie de Castilla-La Mancha y que, como apuntó, necesita ayuda para producir.
“Tenemos que estar de acuerdo y esa es la propuesta que le voy a llevar al ministro en la próxima conferencia sectorial para que la tomen en consideración y se la hagan llegar a Fischler”, manifestó Gómez, y agregó que esta iniciativa está en la línea de lo que dice el comisario europeo, que no es otra que se dé ayuda directa al productor que realmente la necesita y sobre todo a aquel olivar que ocupe un espacio sociocultural y medioambiental importante en nuestras regiones, como es el caso de Castilla-La Mancha y de otras comunidades autónomas, como Andalucía
JCCM