Remitido por AVA-ASAJA:
Aldeas de Requena como Campo Arcís, La Portera y Los Pedrones, entre otras, situadas a 700 metros del río Gabriel (afluente del Júcar) y poblaciones como Chiva, Cheste, Buñol y Godelleta, situadas en la zona norte del cauce y relativamente próximas al río Júcar, podrían garantizar sus cosechas, y por tanto, sus rentas agrarias si pudieran disponer de esas aguas. Según la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), las demandas hídricas de estas zonas son mínimas pero necesarias.
“El envío de sobrantes del Júcar al Vinalopó fue una decisión política que se tomó en un momento dado, pero no podemos olvidar que hay comarcas valencianas que tienen importantes problemas de sequía y que deberían tener preferencia sobre el agua, por limitar con el río y en donde el coste de las obras sería muy bajo, tanto para Requena como para La Hoya, a través de una transferencia al embalse de Forata, actualmente seco”, matizó el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
El estrés hídrico que están padeciendo las viñas de todas estas zonas que no cuentan con riegos de apoyo, con una merma de producción importante, así como la grave sequía en cultivos de regadío, con derechos consolidados, en la zona del Marquesat en la Ribera Alta, hacen que AVA exija que parte de los sobrantes del Júcar se destinen también a estas zonas. Así mismo, otras comarcas valencianas como la Vall d’Albaida, que también sufren una escasez hídrica acuciante, deberían beneficiarse de los sobrantes del Júcar.
AVA-ASAJA