PROAGRO SE MUESTRA FAVORABLE A LA DESTILACIÓN DE CRISIS

La Asociación Nacional de Productores Agroalimentarios PROAGRO ha acogido favorablemente la aprobación, por parte del Comité de Gestión de Vinos de la Comisión de Agricultura de la Unión Europea (EU), de la apertura de una destilación de crisis en España para un volumen de 2,6 millones de hectolitros de vino de mesa, tal y como han venido demandando reiteradamente a las distintas administraciones las organizaciones agrarias. PROAGRO lamenta, sin embargo, que el precio acordado por la Comisión –286,683 pesetas por hectogrado-, no permita compensar los costes de producción de uva al ser inferior a las 320 pesetas por hectogrado que las cooperativas vitivinícolas han estado solicitando y que la institución comunitaria ya había concedido a otros Estados miembros demandantes de idénticas medidas de regulación del mercado, como Italia, Francia y Portugal. Pero si bien la aprobación de esta medida concede un cierto margen de esperanza a los productores españoles de vino, nada aclara el Comité de Gestión de vinos respecto al futuro de los contratos de destilación de uso de boca, por un volumen de 1,6 millones de hectolitros, que fueron presentados en la primera quincena del pasado mes de diciembre y que quedaron sin asignación presupuestaria por sobrepasamiento del cupo comunitario inicial, que ascendía a 12,5 millones de hectolitros. La Comisión Europea había autorizado la destilación de crisis de un millón de hectolitros a Alemania a un precio de 2,1 euros por hectogrado (350 pesetas), y de 120.000 hectolitros para la región italiana de Asti. Para PROAGRO la aprobación de este mecanismo previsto en la actual OCM del Vino puede contribuir a reactivar o al menos sostener los precios del mercado, aquejado de escasez de operaciones como consecuencia de una producción nacional de vino de mesa cercana a los 26 millones de hectolitros en la presente campaña, según las estimaciones oficiales del Ministerio de Agricultura y la existencia de importantes stocks de la campaña pasada. Esta última destilación de crisis tiene la ventaja de que se queda en propiedad del organismo de intervención, con lo que no interfiere ni hace competencia desleal al mercado de alcoholes para uso de boca, ya que principalmente se destina a otros usos, como el de combustibles.

Proagro

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