Nota de prensa de UPA
En la práctica totalidad de la geografía española se está obteniendo una materia prima de excelente calidad que se verá reflejada con unos vinos de igual calificación mientras que los viticultores están percibiendo unos precios inaceptables para dicha calidad y no justificados en base a la situación y perspectivas del mercado
Con una vendimia ya muy avanzada en la mayoría de nuestras zonas vitícolas, y una vez analizado los precios percibidos por los viticultores , UPA califica de injustificable las cotizaciones pagadas por las uvas por parte de las diferentes industrias vinícolas. Por poner como ejemplo a Castilla-La Mancha (con más del 50 % de la producción nacional de uva), y a su variedad mayoritaria (Airén), el kg de uva se está pagando a 15-16 céntimos de euro (25-26 pts/kg). Esta valoración se fundamenta en los siguientes argumentos:
– la producción de esta campaña va a estar bastante por debajo de las estimaciones previstas antes del verano, de cifras que se estimaban entre 42 a 45 millones de Hl según distintas fuentes, la cosecha final se va a situar en una horquilla entre 38-39 mill de Hl, es decir, la presión de la oferta va a ser sustancialmente menor a la inicialmente estimada debido en especial a la ola de calor del pasado verano.
– la calidad de la uva está siendo por lo general bastante buena, con lo cual si fuese cierta la premisa de que la calidad se debe pagar en su justa medida, los viticultores deberían ser compensados por ello, sin embargo no es ésta la realidad, pese a que luego el consumidor si acarreará con dicho sobrecoste a la hora de adquirir unos vinos valorados por sus buenas calificaciones.
– Ayer mismo entró en vigor la nueva norma sobre destilación de vino con destino al mercado de alcoholes, con un período de contratación desde el 1 de octubre al 31 de diciembre. Esta norma supone una mejora sobre la campaña pasada ya que se permite entregar hasta el 40 % del volumen que se contrate sin aguardar a la aprobación final por Bruselas. Y teniendo en cuenta que el volumen contratable se corresponderá al 25 % de cualquiera de las tres últimas campañas en cuanto a producción de vinos de mesa, España podrá ofertar una cifra aproximada de 6,5 millones de Hl a un precio de 2,488 euros/hectogrado (unas 414 pts). Esta salida de vino tanto por su volumen (agiliza el mercado al comienzo de la campaña) como por su precio (bastante por encima del precio de mercado actual) debería ocasionar un incremento en los precios de la uva en origen.
– Las existencias de final de campaña no están suponiendo un problema del calado de otras campañas anteriores, con lo cual hay menos presión de mercado. Además, las exportaciones españolas de vino han aumentado casi un 30 % en el primer semestre de 2003 con respecto al mismo período de 2002, destacando especialmente las exportaciones de vino de mesa a granel, con un incremento de casi el 70 %.
– Las grandes expectativas en producción de mosto en esta campaña pueden alcanzar una cifra de 5- 6 millones de Hl , y que supondrán por tanto un volumen importante a tener en cuenta de cara a la presión de la oferta en el mercado de vinos.
– La escasa producción de uva en Francia e Italia, en el primer caso con una estimación de 47 millones de Hl (la cifra más baja del último decenio) y en el caso de Italia, también con una cifra alrededor de 50 mill de Hl. Este hecho va a suponer que necesiten vino de nuestro país para cubrir su demanda, lo cual se deberá corresponder con un incremento en el precio en nuestro país.
Después de haber intentado llegar a acuerdos con los diferentes grupos bodegueros en varias regiones, y ante la inexistencia de respuesta en algunos casos y de rechazo o no consenso en otras, UPA sigue reclamando a todo el sector, incluidas las distintas Administraciones, la necesidad de llegar a un acuerdo interprofesional entre el sector productor y elaborador con la finalidad de lograr un marco estable de precios a medio plazo y que dé estabilidad al mercado por el bien de todos. Si bien es imprescindible realizar campañas de promoción y divulgación con el objetivo de incrementar el consumo de vino en nuestro país, estas acciones deben ir acompañadas indisociablemente con unos acuerdos homologados por las diversas administraciones en cuanto a precios y calidades. De no ser así UPA no está dispuesta a llegar a acuerdos sólo para cuestiones parciales que no engloban toda la problemática del sector, en la cual el viticultor es la pieza fundamental.
UPA