La alimentación supone en la ganadería porcina un coste muy elevado en la explotación, ya que son alrededor de un 65% sobre los costes de producción. Esto se debe generalmente al incremento de precio en los últimos años de las materias primas para la elaboración del pienso que a su vez repercute negativamente en el beneficio de los ganaderos. Por ello, es muy importante reducir los costes en la alimentación sin que se perjudique el rendimiento de los animales, con nuevas alternativas en cuanto a los ingredientes o técnicas para mejorar la eficiencia.
En este artículo se van a mencionar diversas técnicas para la reducción de costes.
Alimentación líquida
Es un sistema donde el alimento que se le proporciona al ganado es de una forma informatizada y automatizada y se prepara diluyendo el pienso en agua. Es un sistema muy poco consolidado en España, alrededor del 3%, pero muy frecuente en el norte de Europa ya que según el país puede alcanzar el 60% del pienso consumido. Se puede emplear en cualquier fase del ciclo productivo ya sea en lechones, cebo y cerdas reproductoras y se puede realizar en granjas de ciclo cerrado.
Consiste en el transporte de la formulación mediante bombas al comedero de los porcinos. La formulación la realiza un ordenador central que mediante curvas de crecimiento (según la etapa del ciclo productivo) consigue una determinada cantidad de pienso estableciendo las materias primas, cantidad de agua y tiempo de mezclado. Posteriormente se transporta y el mismo ordenador regula la apertura y el cierre de las válvulas de los comederos en función del estado fisiológico y el número de animales.
Tiene la ventaja de que se pueden emplear como materias primas subproductos de las industrias alimentarias (lácteas) y materias fermentadas que aumentan digestibilidad por un aumento de la actividad bacteriana. Además se facilita la incorporación de productos sanitarios y la alimentación se puede ajustar más a las necesidades de cada lote productivo, aumentando así la Ganancia Media Diaria (GMD) el Ïndice de conversión (IC) . Esto también genera una mayor uniformidad en los lotes de cebo y un aumento de carne de canal y tiene una menor contaminación tanto en polvo como en residuos que perjudican al medioambiente.
El inconveniente principal es que se necesita una gran inversión. Según estudios realizados para que este sistema sea rentable deberá tener a partir de 500 plazas de engorde por explotación. También se deberá tener en cuenta la limpieza periódica de las conducciones (tuberías, tanque de preparación) hasta los comederos y la necesidad de personal cualificado para la gestión de los piensos, ya que, por ejemplo según el ph se puede reducir la ingesta o causar problemas digestivos.
Alimentación de precisión
La alimentación de precisión también se conoce en el ganado porcino como porcinocultura de precisión, se utiliza generalmente para porcino de engorde y al igual que la alimentación líquida, también es un sistema informatizado pero esta vez mediante un Robot de Alimentación de Precisión y Gestión y Optimización Inteligente.
Al igual que con la alimentación líquida se tiene en cuenta la heterogeneidad de sus lotes debido a su diferencia de peso e índice de conversión por su estado fisiológico para realizar una alimentación más específica según la fase en la que se encuentren y así conseguir una mayor eficiencia.
Consiste en combinar dos premezclas que aporten a los animales todos requerimientos nutricionales durante su crecimiento. Con sistemas informáticos se consigue una medición del consumo individual y con un sistema de distribución se hace llegar al lugar donde se requiere. A pesar de ello, para facilitar la alimentación se realiza una separación dentro de los lotes (incluso por sexo o genotipo) generalmente según peso y edad.
Con este sistema se pretende disminuir en la ración la aportación de N y P, ya que son los elementos que producen una mayor carga contaminante en el purín, de manera que se reduzca el consumo de proteína, (disminuyendo así el coste de producción) sin disminuir el índice de conversión ni afectar al crecimiento del ganado.
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